¿Qué debo considerar antes de comprar un departamento con mi pareja?
Tomar la decisión de casarte y vivir con tu pareja es un tema serio, más aún si ambos deseen adquirir un departamento juntos. Es muy probable que tengan dudas sobre el estado financiero de cada uno, los problemas que se vayan a presentar, entre otros temas. Incluso, puede que quizás al pensarlo otra vez, crean que no es una buena decisión. No obstante, para toda toma de decisión, es necesario estar informado y ver todas las posibilidades. Por ello, antes de empezar a ver departamentos y emocionarse, Ciudaris Inmobiliaria te muestra algunos tips que debes considerar para saber si realmente están preparados para dar ese gran paso.
Situación financiera
Una de las primeras decisiones que deben tomar con respecto a comprar un departamento, es quién de los dos aplicará al préstamo hipotecario. Es decir, si lo harán juntos o uno de ustedes. La decisión se tomará según la situación financiera de ambos. Para ello, recomendamos que cada uno haga una lista que contenga la siguiente información:
- Tu historial crediticio
- Tu ingreso anual
- Tu deuda total
Si la diferencia entre el historial crediticio de ambos es significativa, puede que deseen optar por la persona que tenga un mayor historial para aplicar al préstamo. Un historial crediticio alto representa una tasa de interés baja y por consiguiente, pagos más bajos. Si se deciden por la persona que tiene un bajo historial, tengan en cuenta que es muy probable que esto determine el tipo de interés que vayan obtener.
Si los ingresos de la persona que tiene mayor historial crediticio son significativamente menores, necesitarán decidir entre lo que para ustedes es más importante: una tasa de interés baja o una mayor cantidad de préstamo.
Titularidad de la propiedad
José y María están comprometidos y planean comprar una casa juntos antes de la boda. María es gerente de marketing de una empresa por seis años y tiene un alto historial crediticio. José, por su parte, vivió la gran vida durante sus días de soltero, vivió en varios lugares y esquivó a los acreedores. Aunque, ahora ha sentado cabeza y tiene el mismo trabajo desde hace un año su historial crediticio es bajo.
La pareja decide que Maria será la que aplique al crédito hipotecario. No solo porque sus posibilidades de ser aprobada son altas, sino que la tasa de interés será menor de lo que sería aplicando con José como co-prestatario.
José está decepcionado porque esperaba que esto sea una sociedad conjunta. Aquí es donde entra a tallar la titularidad de la propiedad. Ya que María está registrada como la responsable de los pagos de la hipoteca, ella puede incluir el nombre de José en las escrituras de la propiedad, después de haber saldado el préstamo. Aunque primero ellos necesitan tomar una decisión sobre la forma en que desean tener el título.
Dos de las formas más comunes de titularidad de una propiedad son: régimen de bienes mancomunados con derecho de sobrevivencia y régimen de bienes mancomunados sin derecho de sobrevivencia. El primero significa que la pareja posee partes iguales de la propiedad. Cuando uno de ellos fallece, su pareja automáticamente toma posesión de la parte del fallecido, independientemente de lo que esté estipulado en el testamento. Este método de titularidad evita el proceso de testamento. Si una de los dos desea vender su parte de la propiedad, el régimen de bienes mancomunados culmina y otra persona se convierte en el co-titular, el cual no tiene derecho de sobrevivencia. La tenencia conjunta tiene ciertas consecuencias fiscales para el sobreviviente. Por ello, recomendamos trabajar con un abogado y un asesor financiero antes de decidir esta opción.
El régimen de bienes mancomunados sin derecho de sobrevivencia es la opción que suelen optar las parejas que no están casadas. Bajo este método, la pareja no tiene derecho a heredar la parte del otro a su muerte. Sino, el propietario le transfiere su parte a las personas que incluye en su testamento o fideicomiso en vida. A diferencia de la otra opción, la pareja puede no necesariamente poseer partes similares de la propiedad. Por ejemplo, María puede poseer el 60% y José el 40%.
Una vez más, para esta opción es recomendable que también consulten a su abogado antes de tomar la decisión.
Posibles problemas
Ninguna pareja, sobretodo aquellas que están a punto de casarse, quieren considerar la posibilidad de que no puedan llegar al altar o que su relación termine. Por ello, es importante que estén preparados para cualquier problema.
Reúnanse con un abogado y discutan las posibles dificultades legales debido a una separación, incluyendo la división de la propiedad y su participación.
Esperamos que esta información te sea útil y lo tengas en cuenta con tu pareja al momento de tomar la decisión de adquirir una propiedad.
Si a ti y a tu pareja les interesa tener una buena vida juntos y están en la búsqueda de un lugar donde puedan encontrar tranquilidad y comodidad, entonces los invitamos a conocer nuestros departamentos en Chiclayo y Lima, así como la gama de beneficios que Ciudaris ha ideado para que tú y tu familia se sientan desde un principio en casa con nosotros. Recuerda, si tienes alguna consulta, no dudes en contactarnos. Nuestro objetivo es que estés 100% satisfecho con nuestros servicios y productos.
*Traducido y adaptado de Realestate.com